La obra ganadora ha sido ‘Tres pinturas velazqueñas’, de Jesús Torres (Zaragoza, 1965). Tras conocer su identidad como autor de la obra premiada y en conexión telefónica desde la propia rueda de prensa, el compositor aragonés afincado en Madrid -y autor de más de 90 composiciones- se ha mostrado “enormemente feliz por el premio. Es el mejor regalo que podía recibir este año, en que he cumplido los 50 años”.

Jesús Torres ha destacado que “este es el premio más interesante a nivel mundial. No sólo por su cuantía económica; que veintisiete orquestas interpreten tu obra es un lujo para cualquier compositor. No creo que exista otro que garantice esa difusión”.

Respecto a su evolución como creador, Torres ha indicado que “llega un momento en que, por razones de madurez, tu escritura se hace más factible. Mi música ha cambiado mucho: ahora es igual de compleja que antes, pero probablemente resulta más sencilla para los músicos que la tienen que interpretar”

'Mi música ha cambiado mucho: ahora es igual de compleja que antes, pero probablemente resulta más sencilla para los músicos que la tienen que interpretar”

Tres pinturas velazqueñas tiene una duración de quince minutos y versa sobre tres lienzos de Velázquez. El primer movimiento se dedica a ‘La Venus del espejo’: “Un constante fluir de diversos motivos en permanente ebullición, con sus múltiples ecos y ramificaciones” refleja “la sensualidad y poesía de la imagen”, comenta el autor. El segundo movimiento aborda “la traslación sonora de Cristo Crucificado, recorriendo caminos que van desde el sombrío y dramático comienzo hasta el místico y desolado final”.

Termina la obra con ‘El triunfo de Baco’, donde Torres explora “la posibilidad musical de pensar en la ligereza, con una célula recurrente de seis notas que aparece completa, fragmentada o pulverizada en una miríada de mixturas tímbricas y armónicas”.

Jesús Torres es autor de 95 composiciones, con obras orquestales y  de cámara de muy diferentes formaciones instrumentales. Entre sus intereses está la musicalización de textos, destacando su constante relación con la poesía de Vicente Aleixandre, además de las de San Juan de la Cruz, Rubén Darío, Miguel Hernández, Juan Eduardo Cirlot o Leopoldo Panero, entre otros.

Entre sus obras de la última década destacan Sinfonía (2005), para el 40 aniversario de la creación de la Orquesta Sinfónica de RTVE; Fausto (2008), música orquestal para la proyección de la película muda de 1926 de F. W. Murnau y estrenada en el Teatro de la Zarzuela de Madrid; Evocación de Miguel Hernández (2010), para soprano, coro y orquesta, compuesta para el centenario del nacimiento del poeta y que se interpretó por primera vez en el Festival de Alicante y Apocalipsis (2011), para coro gregoriano, doble coro y ensemble, con textos de San Juan, encargo de la Semana de Música Religiosa de Cuenca.

Su música se ha interpretado en festivales y series de conciertos de numerosos países: desde la Bienal de Venecia y Musica 99 Strasbourg hasta Musikfestspiele Saar o Ars Musica de Bruselas y Présences 2000 de Radio France, entre otros.

Ha recibido encargos de composición de una amplia variedad de instituciones privadas y públicas, que incluyen el INAEM (Ministerio de Cultura), la Fundación Gaudeamus (Amsterdam), el Programa Caleidoscopio (Unión Europea), el Colegio de España de París, The Associated Board of the Royal Schools of Music y la Orquesta Sinfónica RTVE.