Estrenada en 1900, la inmortal Tosca de Puccini es una de las óperas más representativas del repertorio verista italiano por su intensidad dramática y por contener algunas de las arias más bellas y conocidas de la historia de la ópera. Ubicada en el periodo posromántico, la obra supuso una revolución, abriendo una nueva página de la ópera italiana y el camino hacia un Puccini completamente maduro. El libreto esboza una estructura dramática perfecta, con unidad de tiempo, lugar y acción, y con una tensión dramática constante, que combina amor, intriga, violencia, pasión y muerte.
Floria Tosca, prima donna indiscutible en mostrar sus pasiones: amor, odio y los celos que la llevarán a la tragedia, es interpretada por la voz contundente y segura de Oksana Dyka, una de las sopranos dramáticas más populares del momento. Roberto Aronica interpreta al impetuoso Mario Cavaradossi, uno de los papeles más apreciados en su repertorio, para abordar con maestría el anhelo lírico de “E lucevan le stelle”. Completa el trío protagonista Gabriele Viviani en el papel de Vitellio Scarpia; el carismático barítono ha llevado al personaje del malvado barón a escenarios de todo el mundo y próximamente lo hará en el Metropolitan y la Royal Opera House.
En el apartado musical Pedro Halffter, uno de los grandes maestros internacionales, pone música a una partitura de instrumentación colorista y de gran viveza al frente de la Bilbao Orkestra Sinfonikoa. La parte coral corre a cargo del Coro de Ópera de Bilbao dirigido por Boris Dujin. La dirección de escena es del emblemático regista Mario Pontiggia, un director caracterizado por el rigor de sus propuestas con una producción del Teatro Massimo di Palermo. La magnífica escenografía, con un diseño histórico y monumental, actúa como una caja de resonancia apoyando el impresionante valor pictórico del conjunto escénico, proyectando al espectador en un espacio opulento, dominado visualmente por los símbolos de la Roma papal de 1800, sometida por la cruel policía del Vaticano entre fanatismo, violencia y pompa.
Toda la escenografía es colosal, desde el corte en perspectiva de la cúpula de Sant’Andrea della Valle del primer acto, a los grandes elementos del Palazzo Farnese guarida del diabólico Scarpia, hasta el trágico epílogo en la terraza de Castel Sant’Angelo, donde el escudo de armas papal actúa como un trasfondo simbólico de la muerte de Tosca. El vestuario de Francesco Zito posee un gran esplendor, propiedad cromática y elegancia.
Imagen: © Rosellina Garbo
INTÉRPRETES
Floria Tosca Oksana Dyka
Mario Cavaradossi Roberto Aronica
Barón Scarpia Gabriele Viviani
Cessare Angelotti Alejandro López*
Sacristán Fernando Latorre
Spoletta Mikeldi Atxalandabaso
Sciarrone Jose Manuel Díaz
Un carcelero Gexan Etxabe
Un pastor Helena Orcoyen
Bilbao Orkestra Sinfonikoa
Coro de Ópera de Bilbao. Director: Boris Dujin
Director musical Pedro Halffter
Director de escena Mario Pontiggia
Escenografía Francesco Zito
Vestuario Francesco Zito
Iluminación Bruno Ciulli
Producción Teatro Massimo di Palermo
* Debuta en ABAO Bilbao Opera